Pese a los indiscutibles logros mencionados en la primera parte del estratega español, toca mojarse. Desde Heraldo Esferico, consideramos que el balance de su paso por el Liverpool ha dejado mucho que desear. Entre sus puntos negativos podemos destacar:
- Planteamientos timoratos. El, en ocasiones, exasperante conformismo de Benitez en un grande -venido a menos, pero grande- de Europa, con un rígido 4-2-3-1 incluso jugando como local ante equipos netamente inferiores, provocó ingentes sangrías de puntos que les dejaron sucesivamente fuera de la lucha por la Premier (excepción hecha de la 08-09) cuando aun no habia concluído el invierno. La actitud fue incluso más problema que la táctica. Un empate en Wigan o en Sunderland no te sirve para ser campeón.
- Encorsetamiento del talento. Alérgico a futbolistas de perfil creativo. Nunca terminaron de encajar en su sistema de juego "maquinal" e inflexible, quedando relegado su papel a meros "números 12" desatascadores de partidos de trabados. Kewell, Benayoun, Babel, Voronin, Robbie Keane o Cissé pasaron o pasan por el "rodillo" de Benitez sin pena ni gloria.
Curioso es el caso de futbolistas que han mutado de ingenieros en obreros en el "Spanish Liverpool". Quizá el paradigma de esto es Dirk Kuijt. Contemplar el inútil esfuerzo del punta de Katwijk en las ayudas al lateral y recibiendo a 40 metros del área cuando actúa en banda, o fajándose en la presión sin que le llegue un balón en condiciones en 90 minutos, duele. Exactamente lo mismo que el galés Craig Bellamy o que el recientemente defenestrado Albert Riera.
- Fichajes. Su gran caballo de batalla en su estancia en Anfield.
1. No criticaré los 227 millones de € gastados en contrataciones en 6 años, ya que los menos de 40 "kilos" anuales en fichajes de media son exponencialmente inferiores a lo gastado por la práctica totalidad de grandes europeos.
2. Tampoco los casi 100 millones € de balance negativo entre altas y bajas. El actual mercado de traspasos hace de la pérdida la norma general.
Los números que realmente alarman son los de contrataciones efectuadas y bajas concedidas: 70 y 72 respectivamente. Y, sobre todo, su dudosa calidad.
Sin profundizar en apuestas exóticas "de cantera" tales como El Zhar, Miki Roqué,Idrizaj o Nemeth, que en casos puntuales han salido bien (Mikel San José, Emiliano Insúa):
- ¿A quién no le extraña ver a un club de la solera de los Reds con futbolistas en nómina del pelaje de Josemi, Núñez, Paletta, Cavalieri, Leto, Dossena,N'Gog o Kyrgiakos (casi 20millones por el sumidero), con una falta de categoría alarmante para un grande europeo?
- Innumerables fichajes y salidas incomprensibles. Morientes (10mill€), fichado para ser un carísimo suplente. Venta de un Owen que se salió en la siguiente campaña en Madrid por unos pírricos 12. De un ahora cotizadísimo Alou Diarra por 2, de un cumplidor y polivalente Arbeloa por 4, de un Bellamy titular en el City, de Riise sin tener un lateral solvente para suplirle, comprar (acertadamente) a Keane por 20 en verano y venderlo por 16 en invierno, a Babel y Pennant por 22 en total para ser "suplentísimos"..........Demasiadas incoherencias.
- Carácter arisco y poco dialogante. Discrepancias con su equipo técnico, traído por él mismo (Ochotorena y Ayestarán se marcharon de Anfield por las mismas), el conflicto con Xabi Alonso por impedirle acudir al nacimiento de su hijo, y el más reciente con Riera, son sintomáticos de su incapacidad para manejar el vestuario de un equipo de élite, preocupante tras tantos años en la profesión.
Consecuencia de todo: descapitalización futbolística del Liverpool. Tras seis años los del Merseyside han perdido peso relativo en Inglaterra y conservado en Europa el de un Houllier que, tanto en las islas como en el continente, con menos dinero y mimbres, ganó un título más en un año menos.
Es fácil culpar a los petrodólares del ascenso de Chelsea o City, pero lo cierto es que, sin ir más lejos, el Arsenal de Wenger ha contado con menos recursos y ha conseguido empatar o superar al Pool en 4 campañas en la "era Benítez", además de enamorar con su fútbol y de tener una política de cantera más valiente y ahorrativa que el madrileño. Plantilla con futuro y no menos importante, con estadio nuevo construído, algo que al Pool le queda por hacer.
Conclusión: buen estratega, mal psicólogo y pésimo "fichador". Bye bye Rafa! Keep dancing!
PD: Rafa Benítez será entrenador del Inter de Milan las próximas 2 temporadas.
- Planteamientos timoratos. El, en ocasiones, exasperante conformismo de Benitez en un grande -venido a menos, pero grande- de Europa, con un rígido 4-2-3-1 incluso jugando como local ante equipos netamente inferiores, provocó ingentes sangrías de puntos que les dejaron sucesivamente fuera de la lucha por la Premier (excepción hecha de la 08-09) cuando aun no habia concluído el invierno. La actitud fue incluso más problema que la táctica. Un empate en Wigan o en Sunderland no te sirve para ser campeón.
- Encorsetamiento del talento. Alérgico a futbolistas de perfil creativo. Nunca terminaron de encajar en su sistema de juego "maquinal" e inflexible, quedando relegado su papel a meros "números 12" desatascadores de partidos de trabados. Kewell, Benayoun, Babel, Voronin, Robbie Keane o Cissé pasaron o pasan por el "rodillo" de Benitez sin pena ni gloria.
Curioso es el caso de futbolistas que han mutado de ingenieros en obreros en el "Spanish Liverpool". Quizá el paradigma de esto es Dirk Kuijt. Contemplar el inútil esfuerzo del punta de Katwijk en las ayudas al lateral y recibiendo a 40 metros del área cuando actúa en banda, o fajándose en la presión sin que le llegue un balón en condiciones en 90 minutos, duele. Exactamente lo mismo que el galés Craig Bellamy o que el recientemente defenestrado Albert Riera.
- Fichajes. Su gran caballo de batalla en su estancia en Anfield.
1. No criticaré los 227 millones de € gastados en contrataciones en 6 años, ya que los menos de 40 "kilos" anuales en fichajes de media son exponencialmente inferiores a lo gastado por la práctica totalidad de grandes europeos.
2. Tampoco los casi 100 millones € de balance negativo entre altas y bajas. El actual mercado de traspasos hace de la pérdida la norma general.
Los números que realmente alarman son los de contrataciones efectuadas y bajas concedidas: 70 y 72 respectivamente. Y, sobre todo, su dudosa calidad.
Sin profundizar en apuestas exóticas "de cantera" tales como El Zhar, Miki Roqué,Idrizaj o Nemeth, que en casos puntuales han salido bien (Mikel San José, Emiliano Insúa):
- ¿A quién no le extraña ver a un club de la solera de los Reds con futbolistas en nómina del pelaje de Josemi, Núñez, Paletta, Cavalieri, Leto, Dossena,N'Gog o Kyrgiakos (casi 20millones por el sumidero), con una falta de categoría alarmante para un grande europeo?
- Innumerables fichajes y salidas incomprensibles. Morientes (10mill€), fichado para ser un carísimo suplente. Venta de un Owen que se salió en la siguiente campaña en Madrid por unos pírricos 12. De un ahora cotizadísimo Alou Diarra por 2, de un cumplidor y polivalente Arbeloa por 4, de un Bellamy titular en el City, de Riise sin tener un lateral solvente para suplirle, comprar (acertadamente) a Keane por 20 en verano y venderlo por 16 en invierno, a Babel y Pennant por 22 en total para ser "suplentísimos"..........Demasiadas incoherencias.
- Carácter arisco y poco dialogante. Discrepancias con su equipo técnico, traído por él mismo (Ochotorena y Ayestarán se marcharon de Anfield por las mismas), el conflicto con Xabi Alonso por impedirle acudir al nacimiento de su hijo, y el más reciente con Riera, son sintomáticos de su incapacidad para manejar el vestuario de un equipo de élite, preocupante tras tantos años en la profesión.
Consecuencia de todo: descapitalización futbolística del Liverpool. Tras seis años los del Merseyside han perdido peso relativo en Inglaterra y conservado en Europa el de un Houllier que, tanto en las islas como en el continente, con menos dinero y mimbres, ganó un título más en un año menos.
Es fácil culpar a los petrodólares del ascenso de Chelsea o City, pero lo cierto es que, sin ir más lejos, el Arsenal de Wenger ha contado con menos recursos y ha conseguido empatar o superar al Pool en 4 campañas en la "era Benítez", además de enamorar con su fútbol y de tener una política de cantera más valiente y ahorrativa que el madrileño. Plantilla con futuro y no menos importante, con estadio nuevo construído, algo que al Pool le queda por hacer.
Conclusión: buen estratega, mal psicólogo y pésimo "fichador". Bye bye Rafa! Keep dancing!
PD: Rafa Benítez será entrenador del Inter de Milan las próximas 2 temporadas.
2 cosas. Un 4-2-3-1 depende de los jugadores que lo conformen puede ser una apisonadora mayor que un 4-3-3, a priori no es criticable ni jugando en casa ni jugando fuera. Si la linea de 3 es potente causa muchos estragos, sabiendo que Benitez gustó mucho de plantar a Xabi Alonso y Mascherano en el centro. Ponte delante a Kuyt-Gerrard-Babel con Torres por delante. No veo malo en ello.
ResponderEliminarLa segunda cosa es el tema de los futbolistas de perfil creativo. Lo primero que choca en la lista es Cissé, que es un delantero del montón y se pasó mucho tiempo lesionado (no se ha roto la pierna 2 veces?) La potencia sin control no sirve de nada. Para mi Benayoun si ha sido usado en mayor o menor medida. Está claro que no son sus favoritos pero este ha jugado bastante, aunque claro está que no siempre ha sido titular.
En lo primero estamos de acuerdo en la definición: (Casi) cualquier esquema táctico puede ser ofensivo o defensivo, y el 4-2-3-1 puede serlo.
ResponderEliminarHablando de nombres, ya es cuestión de interpretación. La alineación que has puesto a mi me parecería tan correcta como a ti para un partido en el Camp Nou o en San Siro. Sin embargo, con matices, yo la veo conservadora para los partidos como local, o algunos a domicilio.
¿Matices?Adelantar la defensa o que Babel y Kuyt fuesen verdaderos extremos sin tantas obligaciones defensivas sí lo convertiría en otra cosa, pero no era habitual en Rafa.
Como mencioné, más que de esquema, es actitud. Vi a su Liverpool con el "freno de mano" puesto en muchos partidos asequibles, en contraste con la valentía con que salía ante los grandes.
Me alegra mucho tenerte por aquí, gracias ;D